martes, 1 de mayo de 2007

TÁCTICA Y ESTRATEGIA


Mi táctica es mirarte
Aprender cómo sos
Quererte como sos

Mi táctica es hablarte
y escucharte
Construir con palabras
un puente indestructible

Mi táctica es quedarme en tu recuerdo
No sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en Vos

Mi táctica es ser Franca
Y saber que sos franco
Y que no nos vendamos simulacros
para que entre los dos
no haya telón ni abismos

Mi estrategia es
en cambio
más profunda y más simple

Mi estrategia
es que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites


Mario Benedetti

No hacen faltan más palabras que describan y digan más que esta poesía que leí anoche. No sé, me apetecía escribirla.

Por eso,
Te veo al Amanecer, un Beso.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Que grande es Mario. Lo malo es que resulta tremendamente dificil la tactica, por lo menos a mi me lo resulta, y practicamente imposible la estrategia. De todas maneras, es hermoso dejar huella en alguien, hasta el punto de convertirse en indispensable.

PiTuTi dijo...

En cierto modo, la mayoria de las veces, la táctica y la Estrategia sirven de poco,pero si es bonito, muy bonito saber que has dejado huella en alguien, aunque en ti no termine de dejar huella....

Anónimo dijo...

Jajaja, no es eso. Lo has entendido al reves. En mi si que deja huella, soy yo el que lamenta mi natural incapacidad para dejarla en otra persona.

PiTuTi dijo...

Seguro que si habrás dejado huella en alguien, y has estado tan ciego que no lo has sabido ver ni aprovechar, igual no es quien tu kerías, pero si q le llegaste; y esa persona sabe que te dejó huella?

Anónimo dijo...

Como dice Mario Benedetti, hay que ser francos y que no existan telones ni abismos... Yo aún añadiria más: hay que ser valientes. Para que la huella de la mano se imprima no puede estar velada por nada; para dejar una huella en otra persona, hay que desnudarse emocionalmente. Y se expone uno demasiado

PiTuTi dijo...

Sinceramente, me impresionan tus líneas,todo lo que dices son verdades como un templo.Hoy en día pocas personas somos lo suficientemente valientes para exponernos al otro.